El pasado 18 de noviembre tuvimos la gracia de recibir en nuestra comunidad a la hermana Gloria Narváez, religiosa misionera que fue secuestrada en Mali por grupos terroristas islamistas y permaneció en cautiverio durante varios años. Con una profunda sencillez y una fuerza interior admirable, la hermana compartió su testimonio de fe, resistencia y confianza absoluta en Dios aun en medio de las circunstancias más difíciles.
Agradecemos especialmente a Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), que nos brindó la oportunidad de escuchar de primera voz esta historia que nos invita a reflexionar sobre la libertad religiosa y sobre aquellos cristianos que hoy siguen enfrentando persecución por su fe.
Durante el encuentro, la hermana Gloria nos recordó que ser cristiano en muchos lugares del mundo no es algo dado por hecho. De acuerdo con ACN y distintos informes internacionales, 2 de cada 3 personas en el mundo viven sin libertad religiosa plena, y en 62 países se registran graves violaciones a este derecho fundamental. En 24 países, los creyentes sufren persecución directa, y en otros 38 países enfrentan discriminación por profesar su fe.
Estos datos nos ayudan a dimensionar la importancia del testimonio que escuchamos: no solo se trata de la historia de una mujer valiente, sino del reflejo de la realidad que millones de personas viven hoy.
Agradecemos a todos los que nos acompañaron, y especialmente a la hermana Gloria, por recordarnos con su vida que la fe puede ser luz incluso en medio de la oscuridad.